Contra Corriente es una bodega de Trevelin, en la provincia de Chubut que produce vinos en condiciones extremas; su enóloga Sofía Elena explicó a Prensario del Vino el funcionamiento de la bodega, actividades y futuros proyectos, en representación de los vinos extremos de la Patagonia.
Con respecto a los procedimientos en la bodega, Sofia Elena señaló que varían dependiendo de la época según sea época de cultivo o no. En fuera de temporada, es decir, que no se cultiva, las principales actividades son verificar que esté en correcto funcionamiento el sistema de embotellado, rellenado de barricas, fragmentación del vino, revisar que no haya problemas internos en la bodega y mantener limpia la misma. En cambio, en época de cultivo su trabajo pasa a ser ‘más de campo’: ayuda al equipo en las tareas de poda, replantación y cosecha. Al ser ‘una bodega chica’ y no tener tanto personal, `se pasa más tiempo en el campo que haciendo vinos’, ya que esto sólo requiere dos/tres semanas de preparación.
Si bien actualmente Contra Corriente produce alrededor de 10.000 litros de vinos anuales, que espera aumentar su producción a 30.000 en el corto plazo a través de 4 hectáreas con distintos varietales, que en un futuro se aumentará a 6 Has. con terrenos de la cercanía. “Esto plantea un gran desafío ya que todos los insumos se deberían traer de Mendoza”, señaló la enóloga, quien además remarcó que “la pandemia no afectó tanto a la bodega en el ámbito administrativo, ya que se cuenta con pocos empleados, pero si los afectó en el ámbito turístico: en este 2020 se iban a abrir las puertas al público, y debido a la pandemia esto no ha sido posible”.
Contra Corriente obtuvo recientemente la Indicación geográfica, ya que allí se elaboran vinos de alta calidad. Además, se han comenzado a distribuir los productos de la bodega a mayor cantidad de vendedores minoristas de vinos en más zonas el país. También, espera que en un futuro los vinos puedan salir al exterior, y específicamente a Estados Unidos.
El contacto con sus consumidores por medio de sus redes sociales y sus ventas son generalmente por su página web. Pero, hace hincapié en que se necesita una mayor divulgación de sus vinos: “la comunicación es muy escasa y eso genera la falta de reconocimiento”. Define su producción vinícola como “vinos de otro estilo” y “vinos extremos”, ya que la bodega se encuentra en condiciones extremas para la realización del cultivo.
A nivel personal, Sofía tiene como objetivo producir un mejor Pinot Noir con identidad y complejidad “haciéndolo único”; este varietal es el que más le gusta. Para crear un buen vino, cree que es fundamental tener una buena uva y tratarla con criterio y conciencia para no arruinarla y evitar sacarle la impronta que le otorga el lugar.
Para promover a las mujeres que comienzan en la industria del vino, comentó que, por experiencia propia, cree que “nunca se debe dejar de aprender, ayuda mucho encontrar al principio de la carrera un buen maestro/mentor que transmita conocimientos y pasión por el vino”.
