Mariano Braga, sommelier y hacedor del proyecto “Desde los Polos”, dio más detalles a Prensario sobre el nuevo proyecto que lanzó junto al enólogo Andrés Vignoni, un Pinot Noir que reúne en una botella, “dos miradas muy distintas pero dentro de una misma industria”.
“El proyecto surgió dos años atrás, en un viaje de Andrés a México, luego de que me enviara un mensaje diciendo que quería hacer un vino juntos. Para ese entonces no nos conocíamos personalmente, pero sin dudarlo le dije que sí”, comienza a contar Braga, quien señala que, con el tiempo, fueron puliendo la idea sobre la uva, el estilo y “qué querían reflejar en el vino y, a medida que pasó el tiempo, terminamos con la idea de un Pinot Noir de acidez refrescante, fácil para beber pero que pueda mejorar con los años”.
Y agrega: “Es un gran vino en el que quisimos contar más sobre nuestra amistad, y el ida y vuelta de un sommelier y un enólogo, coincidiendo en lo que queríamos mostrar: dos personas y personalidades completamente diferentes, con miradas muy distintas pero dentro de una misma industria. Por eso “Desde los polos”, porque cada uno suma desde su lugar”.
En lo que respecta a su producción, se realizó una partida de 3 únicas barricas, de las que salieron poco más de 700 botellas, y si bien hay una segunda partida de Desde los Polos en bodega, aún están analizando si saldrá al mercado
De acuerdo con Mariano, es justamente el enfoque de dos figuras tan diferenciadas como son él como enólogo y quien fue elegido “Enólogo Joven del 2020” por Tim Atkin, lo que hace del proyecto tan interesante: “Es interesante porque durante años fueron figuras bastante diferenciadas y, en muchos casos, antagónicas. Al enólogo era difícil verlo en el lugar del comunicador y, para el sommelier, meterse dentro de una bodega era casi descabellado. En los últimos años muchas de esas barreras se borraron de alguna manera, dejando que se entremezclan las actividades”.
“Por eso sentimos que este Desde los Polos es un gran punto intermedio en donde cada uno de nosotros hizo su parte, sumó su conocimiento y experiencia en la tierra, en el estilo, en los aspectos comerciales y de difusión y, claro, en el moldear un perfil de vino que disfrutamos y con el que nos sentimos muy felices de beber”, enfatiza y completa: “El consumidor está enfrentado a un abanico de opciones gigantesco, con una oferta increíble de regiones, cepas y estilos. Nuestro Pinot viene a confundir un poco más ese panorama de diversidad”.
